Compañía estadounidense espera reinstaurar el ferry a Cuba este año

Vista del crucero inglés Thomson Dream. Archivo. 
Un artículo del Jacksonville Business Journal aborda este lunes los viajes de los estadounidenses a Cuba y menciona el caso del empresario Brian Hall, quien espera poder navegar desde Maratón a La Habana, Cuba.

Según comenta la publicación, Brian Hall todavía puede recordar las historias de su abuela sobre el ferry que viajaba a Cuba antes de 1959. "Ella contaba historias de lo maravilloso que era", dijo Hall, cuya abuela solía vacacionar en La Habana.
Hall, un hombre de negocios de Jacksonville, ahora está utilizando la nostalgia del público para alimentar su sueño: Reinstaurar el ferry a Cuba.
"El plan es el siguiente: Hall y sus socios han lanzado CubaKat, un servicio de ferry de pasajeros que iría desde Cayo Maratón a La Habana, Cuba". Dijo que la compañía ya ha utilizado el ferry con 200 pasajeros bajo contrato por parte del vendedor en las Bahamas, y agregó que espera agregar un segundo barco.
"Nuestro plan es conseguir la velocidad que pueda realizar la travesía por debajo de tres horas", dijo Hall. "Esperamos contar en los próximos cinco años con 10 barcos que vayan y regresen".
De acuerdo a Jacksonville Business Journal, utilizar el ferry sería más asequible que viajar en avión. El vuelo chárter de ida y vuelta puede costar entre $429 y $499. El ferry de alta velocidad cuesta cerca de $300, con una duración de alrededor de 4.5 horas para hacer el viaje. Pero la verdadera sorpresa para los vuelos son los costos de equipaje: Algunas compañías cobran $2 por cada libra de más sobre 44 libras, además de los cargos por equipaje adicional, un problema para los viajeros que tratan de llevar bienes a familiares y amigos en Cuba.
Pero CubaKat, que ha programado el mes de septiembre como fecha de inicio, todavía tiene algunos obstáculos por superar.
"Por un lado, tiene que obtener una licencia del Departamento del Tesoro para ejecutar su operación. La solicitud fue presentada hace unas tres semanas y la compañía espera tener su decisión en los próximos tres meses".
Otro obstáculo es la Administración de Seguridad en el Transporte, que deberá controlar a los viajeros de transbordadores antes de embarcarse en su viaje. Eso significará que más gente va a ser contratada para revisar los transbordadores y sus planes de seguridad para operar las embarcaciones.
Pero el obstáculo más grande es la financiación, por supuesto. La compañía está en conversaciones con inversores (Hall no podría nombrarlos) y ha puesto en marcha una campaña para financiar los buques. "Ya los clientes pueden comprar boletos", dijo Hall. "Por la parte cubana, ellos tienen sus brazos abiertos", concluyó.
Fuente: Marti Noticias