El Departamento de Estado les aclara otra
vez a sus ciudadanos qué deben hacer para venir a La Habana sin
equivocarse. Un vuelo desde el aeropuerto JFK, o desde el MIA a Cuba
puede convertir unas vacaciones en un delito si se ignoran las formas
apropiadas. Es la ley y lo seguirá siendo hasta que el Congreso de
Estados Unidos diga lo contrario. Intentando ahorrar molestias,
funcionarios del gobierno federal instruyen a sus compatriotas sobre
cómo cruzar el Estrecho de la Florida portando las justificaciones
necesarias para no violar ciertas proscripciones a las actividades
turísticas bajo el sol criollo.
Hacer sesiones informativas vía Twitter es una práctica ya habitual en
las cuentas de la oficina de John Kerry, como parte del esfuerzo para
orientar a los ciudadanos y residentes estadounidenses sobre las
renovadas relaciones entre su país y Cuba, como explica un comunicado
difundido en Facebook por la Embajada de EE.UU. en La Habana.
Este 10 de agosto, el perfil dirigido al público hispano @USAenEspanol
respondió dudas a tuiteros latinos acerca de las vías recónditas para
viajar a esa isla de la que tanto escuchan hablar últimamente desde
Washington. El asunto sería cosa de broma si no hubiera multas de por
medio, cortesía de la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC
por sus siglas en inglés), el cancerbero encargado de patrullar los
muros económicos erigidos en la Guerra Fría.
Hay que tener cuidado al ir a Cuba, no por lo que pueda encontrar el Tío
Sam cuando toque su suelo (un ambiente de seguridad relativamente
estable, como lo describe el Buró de Asuntos Consulares norteamericano),
sino por el peligro de regresar bajo la sospecha de haber cometido el
crimen de hacer turismo (como ocurrió con la cantante Beyoncé y su
esposo Jay Z hace unos años atrás).
Por eso, durante una hora y en menos de 140 caracteres, los
especialistas en el tema cubano esclarecieron ayer dudas del público
acerca de cómo trasladarse hacia ese país sin violar la ley, remitiendo a
los curiosos hacia páginas web de la Embajada, el Departamento de
Estado y del Tesoro, donde se detallan las particularidades de la
inusual relación entre dos naciones apenas separadas por noventa millas
de mar.
“En la medida en que el viaje haya sido autorizado y con los permisos
apropiados, se puede utilizar cualquier transporte” le informaron a
@amy4Gen cuando ella preguntó en qué podía llegar a Cuba una persona
sujeta a la jurisdicción de Estados Unidos.
Los encargados de atender la sesión informativa recibieron varias
interrogantes de cubanos residentes ansiosos por ir a su tierra natal,
pero con documentación estadounidense. Marlo Baker se niega a sacar un
pasaporte cubano “que es carísimo” y no sabe qué hacer. En Washington
tampoco tienen solución a su problema y le respondieron, naturalmente,
que “el gobierno cubano determina las reglas para personas con doble
nacionalidad para entrar al país.”
Otro de los tuiteros preguntó si habría vuelos chárter entre La Habana y
Miami cuando el Papa Francisco se encuentre dando misa en la isla más
grande del Caribe. “Como en anteriores visitas papales a Cuba, las
compañías realizarán esfuerzos para transportar a los feligreses”,
respondieron.
@cubanitafree se apartó del tema e inquirió si se agilizarían los
trámites para viajes y peticiones familiares. Por decir algo, le
contestaron que “continuaremos a proveer (sic) una amplia gama de
servicios consulares en la @USEmbCuba (Embajada de Estados Unidos en
Cuba).
El perfil @thecuban5 quiso saber si las prohibiciones de viaje quedarán
automáticamente eliminadas cuando el Congreso levante el bloqueo. Los
funcionarios del Departamento de Estado salieron del apuro a la manera
salomónica: “El marco legal del embargo es complejo y dependerá de la
decisión del Congreso. @POTUS (el presidente Barack Obama) ha pedido
levantar el embargo.”
Tomado de: http://oncubamagazine.com/sociedad/american-citizens-cuidado-al-viajar-a-cuba/ © OnCuba
Tomado de: http://oncubamagazine.com/sociedad/american-citizens-cuidado-al-viajar-a-cuba/ © OnCuba